El uso de luces en el jardín es uno de los pasos claves en el proceso de diseño, ya que complementa la belleza del paisaje a la vez que nos permite disfrutar de nuestro patio trasero durante la noche.

Tenemos a nuestra disposición varios tipos de iluminación para elegir. Esta elección dependerá de las necesidades de nuestro jardín, del presupuesto del que dispongamos, tanto para la inversión inicial como para el gasto energético mensual y por supuesto, de nuestras preferencias personales.

Proyectores de luz

Los proyectores son un sistema de luces cuya finalidad en el jardín es crear diferentes efectos a través del uso de diferentes colores de luz.

También pueden generar diferentes patrones y sombras.

Proporcionan una buena visibilidad para los paseos nocturnos, aunque es posible que para algunas zonas en particular como escaleras o senderes, necesitemos utilizar otro tipo de luz adicional.

Lo bueno de este tipo de luces es que no solo logramos iluminar el jardín, sino que también nos permite lograr efectos muy estéticos tanto sobre plantas como sobre estructuras.

Luces de led

Las luces LED están disponibles en una amplia variedad de formas, tamaños y watts. Son de las más eficientes en el uso de la energía y son muy brillantes.

Si hemos elegido un tipo de lámpara transparente cuya luz de LED es demasiado brillante para un área particular del jardín, se le puede agregar un difusor para suavizar la salida. Una lámpara con carcasa, por otra parte, se utilizaría si queremos enfocar e intensificar la luz.

Los LEDs pueden usarse como luces centelleantes, luces empotradas, luces de la piscina, o simplemente focos.

El mayor costo de este tipo de iluminación puede amedrentarnos en un principio, sin embargo, debemos considerar el hecho de que las luces de led tienen una vida útil mucho mayor y utilizan mucho menos energía que otros tipos de luces, lo que mantiene las facturas de energía más económicas, permitiéndonos rápidamente amortizar la inversión.

Iluminación eléctrica

Las luces eléctricas para exterioresincluyen: luces fluorescentes, lámparas de bajo consumo o halógenas.

Están disponibles en la forma de focos, estilo postes, lámparas de pared y una gran variedad de otros accesorios.

También se pueden colorear si es que buscamos ese tipo de efecto.
Estas luces son relativamente baratas en comparación con otros tipos de iluminación, pero las bombillas se queman mucho más rápido que los LED.

También utilizan una gran cantidad de energía y si se utilizan con frecuencia, pueden aumentar significativamente la factura eléctrica del hogar.

Objetivo principal a la hora de iluminar el jardín

Es importante que pensemos bien en cuál es nuestro objetivo al iluminar el jardín.

Puede que solo queramos una iluminación ambiental suave que cree una atmósfera romántica que disfrutaremos al pasear por el jardín durante la noche.
O es posible que busquemos una iluminación más audaz y moderna, con diferentes colores que nos den un gran escenario a nuestras reuniones nocturnas del fin de semana.
Aunque también es posible que solo busquemos colocar luces que delimiten los senderos por los que vamos a transitar y a lo sumo, pensemos en agregar uno o dos proyectores de luces adicionales que realcen algún elemento clave de nuestro jardín como una escultura, un estanque o un simple asiento. Otra posibilidad es quieras agregar una iluminación más para iluminar rincones oscuros y peligrosos por cuestiones de seguridad.

En cualquier caso, es importante que pienses este tipo de cosas antes de decidir qué tipo de luces usarás y por supuesto que tipo de lámparas y accesorios.