Hoy en día, los flexos se han convertido en elementos de trabajo prácticamente indispensables. Gracias a la focalización de la luz, permiten iluminar zonas muy concretas de la estancia. Si quieres equipar tu zona de estudio, trabajo, lectura con un flexo, conviene tener en cuenta algunos aspectos de estas prácticas lámparas. Las hay de distintos tipos y tal vez hay diseños que te convienen más que otros…
Flexos fijos
Los flexos fijos se caracterizan por disponer de unos apliques que se instalan en la pared, iluminando de esta forma la zona en la que se encuentra.
¿Principal ventaja? Con este tipo de modelos no hay que preocuparse de la disposición del flexo. No estorban durante el trabajo y le dan un toque peculiar a la estancia.
Flexos movibles
Flexo de pie
Resulta una alternativa muy interesante. Es ideal para proyectos de interiorismo de estilo minimalista. Además, en la actualidad existe una gran selección de colores y tamaños.
¿Principal ventaja? Si no dispones de una zona muy grande, estos diseños son muy aconsejables. Encajan muy bien en estancias reducidas. Al sostenerse sobre el suelo, el poco espacio disponible del escritorio puedes ser completamente aprovechado.
Flexo con pinza
Su peculiar formato lo convierte en el flexo más polivalente del mercado, ya que puede sujetarse en cualquier parte gracias a su pinza (mesas, ventanas, estantes…).
¿Principal ventaja? Si empleas diferentes zonas de trabajo, estudio o lectura, es la opción más cómoda en el caso de necesitar cambiarlo con frecuencia de sitio. Con este tipo de diseños puedes cambiar tu zona de iluminación con gran facilidad.
El modelo tradicional
Una de las opciones más populares es el modelo tradicional. El clásico diseño regulable encaja tanto para un uso profesional (oficina, despacho, escritorio) como para el personal (mesilla de noche, por ejemplo).
¿Principal ventaja? Es ideal para proyectar una fuente de luz clara y directa; pese a ser el modelo más antiguo su diseño no pasa de moda.
Ten en cuenta que, dentro de estos modelos, también se encuentran los flexos de brazo flexible y los de brazo articulado. En cualquier caso, para seleccionar aquel que más te conviene, te recomendamos echarle un ojo a los catálogos de lámparas que h ay en el mercado y dejarte asesorar por tiendas especializadas.
